Formas convexas o cóncavas
Dimensiones horno
En la búsqueda constante de innovación en el diseño arquitectónico, el vidrio curvo emerge como una expresión única de elegancia y creatividad. Cerviglas, con más de cuatro décadas de experiencia en la industria del vidrio, ha perfeccionado el proceso de la fabricación de vidrio curvado, ofreciendo soluciones personalizadas, con radios diferentes, que transforman los conceptos arquitectónicos en obras tangibles tridimensionales.
Este proceso sobre vidrio agrega un elemento distintivo y artístico a cualquier estructura arquitectónica, creando formas orgánicas y atractivas.
Las formas curvas del vidrio permiten una mayor entrada de luz natural, creando interiores luminosos y atractivos.
Desde fachadas de edificios hasta muebles y elementos decorativos, el vidrio curvado se adapta a una variedad de aplicaciones arquitectónicas y de diseño.
En los dos hornos de curvado podemos realizar, con los requerimientos del cliente, los vidrios curvados a través de moldes y con unas dimensiones máximas de 4’4 m x 2,7 m. En el vídeo puedes ver el proceso, pero te lo explicamos también aquí:
El vidrio se corta cuidadosamente a las dimensiones específicas requeridas para el proyecto. Este paso es crucial para asegurar que el vidrio se pueda curvar de manera uniforme y precisa.
Las piezas de vidrio se colocan en un horno especializado. El calor gradual permite que el vidrio alcance su punto de flexión, volviéndolo maleable y listo para el proceso de curvado.
El vidrio se coloca sobre un molde con la geometría adecuada para obtener la curvatura requerida, una vez alcanzada la temperatura de plasticidad del vidrio, éste cae por gravedad sobre el molde adaptándose a su forma.
El proceso de curvado termina con el enfriado del vidrio de forma lenta -denominado recocido- a fin de evitar tensiones internas.